Redacción
Rodulfo Reyes
En la pelea por la candidatura a gobernador de Tabasco para 2024, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, se impuso en la elección de consejeros nacionales de Morena, dejando atrás a la corriente del director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, y del titular de Fonatur, Javier May Rodríguez, quien ya hace campaña por la Quinta Grijalva con la supuesta autorización del presidente Andrés Manuel López Obrador.
De los 60 espacios de quienes elegirán a finales de la próxima semana a la dirección estatal del vinotinto, para posteriormente encaminar las candidaturas rumbo al 2024, Adán Augusto se quedó con 38 asientos y May con 22, lo que virtualmente le da al primero la presidencia del partido.
En el proceso interno del sábado pasado, el grupo de Los duros o fundadores se quejó de que el ex presidente del PRI estatal, Adrián Hernández Balboa, estuvo acarreando gente para apoyar al diputado federal Mario Llergo, representante de Morena ante el INE y “precandidato” a la gubernatura.
Adrián y Mario, en su época de priístas formales, pertenecieron a la cuadra del ex abanderado del PRI a la gubernatura en 2012, Jesús Alí de la Torre, quien ya se integró a Morena tras de que en 2018 fuera candidato independiente y declinara por Adán Augusto López, su par vinotinto.
Aun con minoría en el consejo político estatal, los Duros se han puesto a la cabeza en el hándicap por la nominación para 2024: May, en su condición de responsable de la construcción del Tren Maya, es el único aspirante visible que ha logrado articular una estructura electoral con el apoyo de ayuntamientos que lo consideran el candidato del Presidente.
Esta percepción creció como la nieve luego de que hace unos días José Ramiro López Obrador, hermano del mandatario nacional, declaró que May era hombre de todas las confianzas del Presidente, y que –además– el funcionario federal lo estaba apoyando para que él –el consanguíneo– llegara al consejo político estatal de Morena, como ocurrió el fin de semana último.
A diferencia del legislador federal Mario Llergo, que anda en campaña diciéndose representante del grupo del secretario de Gobernación, a May ya se le han sumado dirigentes morenistas con representación como los diputados locales Rafael Elías Sánchez Cabrales y Jorge Bracamontes, así como la secretaria de Desarrollo Energético, Sheila Cadena, y el subsecretario de Salud, Manuel Pérez Lanz.
Sin gallos acreditados, la corriente de Adán Augusto ha sido rebasada por la propuesta de Los Duros, a cuya carta fuerte presentan en su propaganda como “el fundador que será gobernador”.
May, que está más dedicado a su campaña que a sortear las dificultades que enfrenta el Tren Maya, la principal obra del Gobierno de la república para al sureste, se ha puesto adelante porque es idea generalizada que el de Macuspana lo apoya; su equipo en redes sociales, además, ha hecho difundir encuestas de dudosa procedencia que lo ubican como el más aventajado en la intención del voto.
Por lo pronto, aunque para nadie es un secreto que AMLO manda en Morena y con mayor razón en su tierra, May tendrá que continuar su peregrinar sin el respaldo del consejo político y de la dirigencia estatal, que será de la corriente de López Hernández al lograr mayoría en la elección del sábado pasado.
Haberse quedado con la mayoría de consejeros, un 60 % aproximadamente, le da a Adán Augusto la aureola de ser el más poderoso integrante tabasqueño del equipo presidencial, pero esa corona se la abolla la cargada con Javier May.
Vaya, en municipios donde los alcaldes apoyan al director del Tren Maya, como Balancán, han recibido al mandatario estatal Carlos Manuel Merino Campos, quien es parte del equipo del secretario de Gobernación, con gritos de ¡Javier May gobernador!
En el gabinete, de igual forma, se ha resentido la percepción de que el titular de Fonatur es el candidato de la línea, ya que algunos integrantes como la secretaria de Desarrollo Energético y el subsecretario de Salud se han sumado a la precampaña de May.
Además de no hacer caso a los llamados del Ejecutivo en cuanto a que “no por mucho madrugar amanece más temprano”, como dijo hace algunas semanas que le preguntaron del destape de Javier May, algunos funcionarios de primer nivel creen que Adán Augusto manda en Tabasco y no respetan la investidura de Merino Campos.