Por
Rodulfo Reyes
El nombre de Octavio Romero Oropeza, titular de Pemex, como Plan B del presidente Andrés Manuel López Obrador para la sucesión en su tierra, empieza a ser mencionado lo mismo en la Ciudad de México que en Villahermosa, lo que indicaría que le habría traído consecuencias a Javier May Rodríguez, precandidato a la gubernatura de Tabasco y director de Fonatur, haberse puesto al frente de una corriente interna que se pronunció públicamente a favor de la nominación de Claudia Sheinbaum Pardo.
De acuerdo con versiones del partido Morena, que el también responsable de la construcción del Tren Maya esté operando en el estado a favor de la candidatura presidencial de la jefa de Gobierno capitalino no fue bien recibido en Palacio Nacional, aunque allegados al exsecretario de Bienestar aseguran que este “no se manda solo”.
La pista que dan para “amarrar” la versión de que el de Macuspana fue enterado de la estrategia de hacer campaña por la corcholata de la metrópoli en Tabasco, en detrimento del secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, quien también es precandidato presidencial, es que José Ramiro López Obrador es “el más ferviente” seguidor de Claudia.
Una foto del hermano del Presidente en el Consejo Nacional vinotinto, el fin de semana, levantando una cartulina en apoyo de la madamás de la capital, es la «prueba» para “confirmar” que Claudia es “la candidata de la familia López Obrador”.
“No, hermano, Javier conoce bien a Andrés (Manuel) y no se hubiera atrevido por su cuenta a encabezar a un grupo a favor de Claudia”, le dice al reportero un morenista tabasqueño que también gusta de remedar la forma de hablar del Presidente.
Según estas fuentes, el responsable del Tren Maya recibió indicaciones de Palacio Nacional para instalar la propaganda a destiempo que hay en todo Tabasco a favor de quien se considera la corcholata favorita.
A decir de los seguidores de May, quien se hace llamar el Tren May por eso de que le va a pasar encima al grupo de los neomorenistas del secretario de Gobernación, si Sheinbaum resulta la abanderada presidencial él competiría por la Quinta Grijalva.
Ayer, sin embargo, los seguidores de May se desayunaron con la sorpresa de que podría haber cambio de planes y que no es seguro que el funcionario federal vaya a Plaza de Armas.
El columnista Carlos Loret de Mola publicó este martes en El Universal: “Cuentan que pronto dejará la dirección general de Pemex Octavio Romero Oropeza, para buscar la candidatura de Morena al gobierno de Tabasco. En los pasillos de Palacio Nacional dicen que el Presidente le ofreció la posición a Claudia Sheinbaum, para que no le falte financiamiento a la campaña. Pero que Adán Augusto se cruzó, y hoy ambas corcholatas se jalonean por la que ha sido una histórica caja chica”.
Octavio, a quien se considera el verdadero jefe de la corriente de Los fundadores o duros, no ha dicho con todas sus letras si quiere ser gobernador y, más bien, ni se ha encartado ni se ha descartado.
El 8 de julio pasado, quien fuera oficial mayor en el gobierno capitalino con AMLO, se apuntó por la gubernatura tabasqueña, sumándose así al adelantado Javier May, que desde que fue secretario de Bienestar aprovechó la plataforma de Sembrando vida para crear una robusta estructura electoral.
Sin embargo, tres meses antes, el 11 de abril pasado, Romero le había dicho a la prensa local que él estaba con Javier May, y observó: “(…) yo diría que se tienen que respetar los tiempos, porque los adelantos de los tiempos no ayudan; estamos hablando de que esta administración lleva tres años y medio, todavía faltan dos años y medio, desde luego ya sabemos que un año antes salen candidatos y todo, pero todavía falta”.
De ser Octavio quien está en la mente de López Obrador tras la metida de pata de May, no se trataría propiamente de un Plan B, ya que ambos pertenecen al grupo de Los fundadores, que se siente el verdadero representante del lopezobradorismo en Tabasco.
No sería Plan B porque en la ecuación se deja fuera a la corriente de Adán Augusto, aunque todo mundo es de la idea de que en su tierra bastará un manotazo del Presidente para entronar al que quiera como gobernador.
Lo que se entiende del lema de campaña de Javier May –Un fundador será gobernador– es que los morenistas “puros” no aceptarán a un candidato que provenga del grupo de Adán Augusto.