Por
Rodulfo Reyes
En la era priísta, la elección de la carta para gobernador de Tabasco por el partido gobernante dependía del candidato presidencial y del mandatario mexicano en funciones. Por eso siempre competía por la Quinta Grijalva quien resultara de un acuerdo entre aquellos, pero con un tabasqueño en Palacio Nacional el tema parece adquirir otro matiz: hoy nadie tiene duda que será el dedito de Andrés Manuel López Obrador el que señale al ungido. Acaso por eso ningún morenista se está moviendo por la libre.
A saber, el único con posibilidades de lograr la nominación por la vía rápida es Javier May Rodríguez, director de Fonatur, quien anda en abierta campaña con el lema Un fundador será gobernador, en referencia implícita a que los duros de Morena no dejarán pasar a un expriísta de la cuadra del secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández.
Aunque sus allegados aseguran que el también responsable del Tren Maya ya recibió la anuencia del natural de Macuspana para avanzar hacia Plaza de Armas, en los últimos días el funcionario federal pareció entrar en un impasse tras el desencuentro ocasionado por la agresión de José Ramiro López Obrador al encargado de la política interna de la nación, episodio doméstico que fue rechazado a principios de semana por AMLO.
Los ataques del hermano del Presidente en contra de Adán Augusto, que arrancaron el 21 de agosto pasado, invariablemente han ido acompañados de pronunciamientos a favor de las candidaturas a la Presidencia de la mandataria capitalina Claudia Sheinbaum Pardo y de Javier May por la gubernatura.
De hecho, el hermano incómodo le pega a López Hernández en presencia del Tren May, como se hace llamar el funcionario, y los discursos violentos de José Ramiro son aplaudidos por los diputados locales Rafael Elías Sánchez Cabrales, Jesús Selván García y Jorge Bracamontes, entre otros integrantes del equipo de campaña en Tabasco de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
Por el lado del secretario de Gobernación nadie de peso busca la candidatura, y los tibios intentos de su hermana Rosalinda López Hernández, alta directiva del SAT, se esfumaron conforme Adán Augusto empezó a figurar como el segundo favorito de Andrés Manuel.
De manera natural, sin embargo, el nombre de Raúl Ojeda Zubieta, presidente del consejo político estatal de Morena, se empieza a perfilar como el equilibrio en la solitaria campaña de May.
Quien fuera tres veces candidato del PRD lopezobradorista a la Quinta Grijalva se ha logrado meter en el imaginario tabasqueño como el segundo allegado al Presidente, después de May, en contar con posibilidades de dar la pelea en 2024.
De acuerdo con encuestas conocidas por este reportero, encabezan la intención del voto en Tabasco por Morena el propio May, Rosalinda y Ojeda, sin que haya un claro puntero en la terna.
Si bien el encargado del Tren Maya sigue apareciendo como el favorito del Presidente, Ojeda tiene la ventaja de que es aceptado en las clases media y alta, de la misma manera que no es rechazado en el grupo de Los fundadores o duros que capitanean May y el director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, como sucede con Rosalinda, a quien la tiene vetada el lopezobradorismo en Tabasco por sus lazos de sangre.
Para su información…
Aunque de manera informal, dirigentes del PRI, PRD y Movimiento Ciudadano están sosteniendo reuniones para buscar una candidatura común para 2024. Ha trascendido, sin embargo, que cuadros perredistas estarían filtrando el avance de las negociaciones a la cúpula vinotinto. No hay por el momento, empero, algún escenario que apunte a la derrota de Morena dentro de dos años. Tanta seguridad hay en mantener la Quinta Grijalva¸ que el pleito interno por la candidatura pareciera ser ya el proceso constitucional para ganar la silla del Ejecutivo. “En Tabasco va a ganar el morenista al que AMLO le levante la mano”, se asegura en la clase gobernante.