Por
Rodulfo Reyes
Lo primero que salta a la vista de la declaración del director del ISSET, Rodolfo Lehmann Mendoza, sobre la existencia de una especie de mafia de batas blancas en la dependencia, es que es la primera vez que una autoridad se lanza contra médicos al servicio del gobierno que estarían incurriendo en prácticas venales con el erario y que afectan a los derechohabientes.
En segundo lugar, la postura del ex subdirector médico de Petróleos Mexicanos (Pemex) acaso ayude a entender la campaña negativa lanzada recientemente en su contra en redes sociales.
Una investigación sobre las cuentas, la mayoría apócrifas, que han compartido fake news para desacreditar al Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco llega hasta allegados o colaboradores de ex funcionarios del sector salud.
La andanada contra Lehmann Mendoza empezó cuando aseguró, en el marco de la Comisión de la Verdad del ISSET formada en el Congreso local, que ex directivos de ese instituto incurrieron en malos manejos de su fideicomiso.
La denuncia de Lehmann se circunscribe en la política del actual gobierno de ir contra la corrupción del pasado.
Por lo pronto ya han sido despedidos trabajadores de la dependencia que cayeron en negligencia médica y hasta robo de insumos y prótesis.
La nueva administración del ISSET descubrió un esquema de desvío de recursos, así como prácticas inmorales que afectaban la salud de los pacientes.
Entre otras irregularidades, se encontró que algunos galenos se negaban a operar en la institución para «llevarse» a los pacientes a sus consultorios particulares poniéndoles prótesis que eran sustraídas del mismo hospital público.
La pandilla médica se robaba insumos como medios de contraste para tomografías.
Se pudo documentar que en el área de tomografías se vendían los mismos medios de contraste propiedad de la institución.
Con toda seguridad, en los próximos días los involucrados le soltarán metralla al titular del ISSET, como respuesta a los señalamientos que los dejan mal parados.
Algunos médicos le dijeron a este reportero que Lehmann Mendoza no debió hacer esa acusación porque sentaba en el banquillo a todo el gremio, aunque en el señalamiento queda claro que la imputación es directa contra facultativos de la institución.
Sin embargo, muchos ciudadanos y profesionales en general vieron bien que se aireen los problemas que existen en la dependencia, pues la corrupción de ese tipo afecta a quienes ahí reciben seguridad social.
